Así ha sido la elaboración de este sagrario de estilo neogótico destinado a una capilla en Vietnam.

Celebración de la Santa Misa en la capilla privada en Vietnam a la que ha ido destinado el sagrario.

UN TRIBUTO AL ARTE GÓTICO

El sagrario es de estilo neogótico y recoge en su diseño todos los elementos representativos de este estilo arquitectónico, como si se tratara de una iglesia en miniatura destinada a contener exclusivamente las especies sacramentales.

Este homenaje al arte gótico contiene, entre otros elementos, las características pilastras con arcos ojivales, un tejado principal a dos aguas enfrentado con dos tejadillos menores, donde destacan el relieve de las tejas en contraste con el resto de la ornamentación grabada, ocho pináculos y pequeñas cresterías sobre los arcos ojivales. Además, la pieza está embellecida con esmaltes muy coloridos a imitación de los grandes ventanales de vidrieras y los rosetones presentes en las catedrales góticas.

LA EJECUCIÓN DEL TABERNÁCULO PASO A PASO

Este sagrario, modelo de Granda, cuenta con multitud de piezas, algunas ensambladas mediante soldadura y otras mediante los cerca de 180 tornillos que se han empleado en su realización. Jesús, del departamento de orfebrería, nos cuenta que la ejecución de la pieza ha supuesto más de 400 horas de trabajo de diferentes departamentos que deben trabajar perfectamente coordinados.

El sagrario tiene una estructura en tres partes: la caja interior, la carcasa y un tejado compuesto por jabletes a imitación de las cubiertas de las catedrales góticas.

El sagrario comenzó a construirse por la base, fabricando las molduras donde más adelante irían acopladas las cuatro láminas que conforman la carcasa exterior y que previamente han sido grabadas con elementos característicos del gótico: pilastras, arcos ojivales, cresterías, ornamentos de tracería... Este grabado se realiza rebajando el metal con la fresadora, en primer lugar, y cincelando, después el fondo.

El interior del sagrario se fabrica por separado. En Granda siempre recibe un baño de oro, material noble, puesto que está en contacto con las especies reservadas que son el mayor tesoro de la Iglesia. Una vez bañado es insertado dentro de la carcasa.

Por último, se levantó la cubierta del sagrario a partir de una estructura en latón y piezas de galvano (cobre trabajado mediante la técnica de galvanoplastia para marcar el relieve de las tejas.

Paralelamente, el departamento de esmaltes trabajó las piezas que embellecerían el sagrario aportando color y temática. Así, la puerta contiene un esmalte de la anunciación y acompañan la escena otros motivos emulando ventanales y rosetones en los que predomina el color azul intenso, a juego con el manto que lleva la Virgen en el esmalte principal.